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En 1921 se descubrió la insulina y se comenzó a utilizar para tratar la diabetes. Al principio se utilizaba insulina extraída de los animales, que era muy parecida a la humana, pero provocaba reaciones alérgicas. Posteriormente se comenzó a sintetizar insulinas humanas que son idénticas a las producidas por el hombre.
En la diabetes tipo uno el páncreas deja de producir insulina pero como no podemos vivir sin ella, las personas que tenemos diabetes nos tenemos que inyectar insulina. La insulina no se puede administrar via oral ya que se destruye, se tiene que administrar directamente a la sangre.
Para calcular la cantidad de insulina que una persona necesita el endocrino te hace un estudio personalizado y tendrá en cuenta valores como tu edad, sexo, dieta, actividad física y peso. Una vez hecho este estudio cada persona tiene unas pautas de insulina, que son las unidades de insulina que esa persona requiere al día para mantener sus niveles de glucemia en un rango correcto.
Perfil de acción de la insulina
Es el tiempo que tarda la insulina en hacer efecto y tenemos:
- Inicio de la acción: tiempo que pasa desde que se inyecta hasta que comienza a hacer efecto y baja la glucemia.
- Momento de máxima acción: es el momento en que los niveles de insulina en la sangre son más elevados.
- Final de la acción: momento en que deja de hacer efecto.
Este perfil de acción de la insulina varia de una persona a otra y también depende de factores como la zona donde se inyecte ( abdomen y brazo es donde más rápido se absorbe) y la cantidad de insulina ( mientras mas insulina te inyectes, más dura el efecto).
Tipos de insulina
A continuación os exponemos un cuadro con los diferentes tipos de insulina, su tiempo de inicio, su pico (acción máxima), su duración y otras características. Sobre que tipo de insulina se utilizará depende de la valoración que haga tu médico pudiendo establecerse de inicio el uso de un determinado tipo de insulina y tras ver su efecto sobre tu glucemia se opte por cambiar el tipo de insulina.
Modificaciones de las pautas de insulina
Como todos sabemos la diabetes no es una ciencia exacta y tampoco hay dosis fijas de insulina a lo largo del tiempo ni iguales para cada persona. Todos tenemos que saber cuales son nuestros niveles de glucemia estables y observar nuestro patrón de glucemias, en el caso de que no consiguieramos unos buenos controles de glucemia con el tratamiento que tenemos establecido se han de aplicar modificaciones y hay de dos tipos:
Modificaciones de la pauta base
Tienen por objetivo determinar las dosis de insulina adecuadas en condiciones normales. Al principio te las hace tu endocrino o tu educador en diabetes, a medida que vamos adquiriendo experiencia con la enfermedad las podemos hacer nosotros mismos. Para hacer estas modificaciones se aconseja seguir una serie de normas:
- Los cambios de dosis de insulina se tienen que hacer si las alteraciones en la glucemia no son debido a la alimentación, actividad física u horarios de las comidas y si las hiperglucemias o hipoglucemias se repiten 2 o más días.
- Se ha de cambiar solo un parámetro ( insulina, alimentación, tiempo entre inyección o zona de inyección ) y esperar 2 o 3 días para valorar los cambios.
- Una vez hecho el cambio hay que mirar los efectos en la glucemia.
Modificaciones puntuales Consiste en aumentar o disminuir las dosis de insulina rápida y el tiempo entre inyección e ingesta de alimentos para corregir una situación en concreto.
Por ejemplo si tenemos una hiperglucemia a la mañana nos tendremos que inyectar una cantidad extra de insulina para evitar que nuestra glucemia siga siendo alta.
En el caso de que variaramos actividad física y alimentación también deberemos realizar modificaciones puntuales y siempre han de ser individualizadas para cada persona.
¿Donde se tiene que guardar la insulina?
La insulina es una hormona sensible a la luz y a la temperatura por lo tanto se tiene que proteger de la luz del sol y guardarla en la nevera a una temperatura entre 2 y 8ºC y nunca debe llegar a congelarse por lo que se evitará que roce las paredes del refrigerador.
Cuando comenzamos a utilizar la insulina, ésta aguanta a una temperatura ambiente de 4 y 30ºC durante 1 mes. Que suele ser más o menos el tiempo que nos dura la utilización de esa insulina.
BIBLIOGRAFIA
- “Com conviure amb diabetis tipus 1” Generalitat de Catalunya-Departament de Salut
- “El libro blanco de la diabetes” Mónica Delgado Hernández
- ADC (Asociación de Diabéticos de Cataluña)